Desde siempre cuando algo me molesta o lastima lo ignoro
Es una excelente estrategia, alguna vez lo intentaste?
Puede denominarse la estrategia del avestruz.
Y me funcionó… eso creo
Hace unos días me di cuenta que además utilizo la estrategia del analfabeto, la cual consiste en no mencionar la palabra que describe mi preocupación o pena, nunca la escribo y muy muy rara vez la pronuncio
Es más, cuando alguna palabra similar aparece en una lectura, dejo de leer
Y cuando un pensamiento cuya composición alfabética se parece, cambió inmediatamente de idea
Y con eso no quiero decir que no deje de pensar en mi problema 25 horas al día, sino que solamente no le pongo rótulo, ni le asigno un título
Las dos son muy buenas estrategias para refocalizar el accionar del dia-a-dia, y llegar vivo al dia siguiente para seguir dandole a la vida.
ResponderEliminarSegun dicen personas entendidas en la mente, hacer lo contrario de lo que recomienda Berenice, solo sirve para potencializar exponencialmente cada vez mas a los pensamientos, palabras o ideas que nos disguntan, que nos atemorizan, que nos entristecen o que nos traen recuerdos ingratos. Hasta que finalmente se hacen tan grandes y pesados que no nos dejan avanzar y terminan ellos definiendo el rumbo y la calidad de nuestras vidas.
Con las dos estrategias de Berenice se logra que uno conduzca todos los aspectos de su vida (incluyendo los pensamientos) como uno quiere. Los pensamientos los construye uno y tienen que estar a nuestro servicio y no al reves