lunes, 30 de enero de 2012

Títulos

Tengo la mala costumbre de nunca leer los subtítulos de los documentos o los nombres de los capítulos de los libros que leo. Nunca lo hice, y creo que nunca lo haré.
Demás está decir que ando adivinando lo que me depara la lectura.
Tal vez si antes de venir a este mundo me hubiera tomado unos segundos para saber cómo titulaba la aventura que iba a vivir no andaría a tientas y al menos tendría una idea de si mi vida iba a tratar de un drama o de una comedia.

viernes, 27 de enero de 2012

Significado de los sueños

Yo creo mucho en esto del significado de los sueños.
Es por eso que alboroto a mi pobre madre, que es psicóloga, cada vez que tengo sueños que me impacientan.
Generalmente me dice que está fuera de horas de oficina y que no la haga trabajar, pero en otras me dice lo que quiero oír para tranquilizarme.
Pero, sabes que nunca soñé contigo?
Una vez, al parecer si, aunque no pude ver tu cara te abrazaba muy fuerte.

Anatomía

Todo empezó hace más de 20 años en las caderas, con dolor a los costados de ellas.
Algunos años después fue recorriendo la incomodidad al estómago, por las pastillas para apaciguar el dolor.
Luego, se apoderó de la garganta, en ella se creó un nudo por la incertidumbre de todo lo que pasaba.
Después el cerebro fue tomado, maquinando diariamente, procesando miles de datos y de información, creando ideas innecesarias y poco productivas.
La pierna derecha fue cómplice posteriormente, con ese tambaleo constante, lleva el ritmo del corazón, y aunque su intención no es mala porque sólo intenta sosegar, delata, porque transmite al mundo lo que el cuerpo lleva dentro.
La sangre se encargó de transferir toda la carga a los ojos, que supongo que por tanta agua salada que filtró todos estos años, cambió, distorsionó y se cayó. Haciendo que esa mirada que durante muchos años fue traviesa, hoy esté triste, transmitiendo pena y desesperanza.
Finalmente, tal vez por el peso de la mirada, los pómulos aumentaron de peso y cayeron, deformando la boca. Y ahora desdibuja una sonrisa invertida, como de caricatura.

martes, 17 de enero de 2012

Luces de bengala

Tal vez deba lanzar una luz de bengala para que Dios sepa mi ubicación
O escribir con lucecillas de bengala mil veces mis sueños para que Él sepa en qué consisten
Tal vez... no sé...

domingo, 15 de enero de 2012

Arcilla

Miro hacia ambos lados y sólo veo oscuridad
Mis brazos están cansados y adoloridos y a la vez inertes
Logro mover la mano para tocar el espacio que me rodea
Y siento arcilla húmeda y fresca
que me recubren como embalsamamiento

Castillo de Cristal

Una de mis travesuras favoritas era invertar que tenía un castillo de cristal detrás de la casa de una de mis abuelas.
Si algún otro niño dudaba de esta mi falsa verdad, mi abuelita decía que si existía, pero que era sólo mío.
Esa complicidad simplemente me encantaba.
Quién diría que casi 30 años después del loco invento de mi cabecita iba a ver, en vivo, directo, 100% realidad, 0% fantasía a mi castillo de cristal.

Mundo paralelo

A veces me asomo al mundo al que no pertenezco
y fantaseo
imagino cómo sería si esa fuese mi realidad

Luego de una hojeada,
me anestesio
y vuelvo a mi piel
a este mundo paralelo

jueves, 5 de enero de 2012

Contracorriente

Hoy leí algo muy interesante, una amiga escribió que ante situaciones poco agradables (o si prefieres ante las pruebas que te pone la vida) tienes dos opciones, la primera es nadar contra corriente y la segunda es ir con la corriente nadando como pececillo.
Sólo espero que la corriente y yo tengamos el mismo objetivo y que me lleve hacia donde quiero ir…

Itis

Ya son casi 6 días que estoy afonica, todo gracias a la itis: largitis, faringitis y otitis.
Puedo concluir que preferible mal acompañada que sola.

miércoles, 4 de enero de 2012

Afónica

Desde el 31 de diciembre (es decir 4 días y contando) estoy afónica, perdí la voz por una itis (no sé si será laringitis o faringitis)
Pensé que iba a extrañar mi voz, pero no es así…
Este año nuevo me di cuenta que tal vez es mejor escuchar lo que la gente me quiere decir.
Así que hablen, porque soy todo oídos

Infortuita

Hoy descubrí que la palabra infortuita no existe, o al menos no está reconocida por la real academia de la lengua española.
Independientemente del hecho de que mucha gente no podrá beneficiarse de esta palabra tan interesante, corta, precisa y cortés, me pregunto si: ¿El hecho de que algo no sea reconocido significará que no existe?